Aguas residuales y el suelo, amenazan la vida de los arrecifes

En la actualidad, los arrecifes de coral se han convertido en uno de los ecosistemas más amenazados del planeta y están muriendo a tasas alarmantes en todo el mundo a causa de las aguas residuales y del suelo, los cuales son tratados inadecuadamente.

Corales
Arrecife de corales

Los corales marinos son animales coloniales y forman grandes arrecifes. La estructura del coral es blanca y los diferentes colores que presentan se deben tanto a los diferentes pigmentos de sus tejidos, como a unas microalgas que viven unidas a los corales.

Actualmente, éstos han empezado a perder sus colores. Fue en mayo de 2018 cuando, por primera vez en México, se identificaron unas pequeñas manchas blancas que salpicaban los corales.

Tras estudios, se determinó que se trataba de una enfermedad insólita a la cual se le conoce como “Síndrome blanco”. En menos de un año, ésta ha acabado con más del 30% de los corales del Sistema Arrecifal Mesoamericano: un hábitat para más de 100, 000 especies.

Este síndrome hace que una vez que los corales lo padecen, su tejido se desprende hasta dejarlos desnudos, en esqueleto, y mueren en cuestión de semanas.

Investigadores del Instituto Oceanográfico Harbor Branch de la Florida Atlantic University han descubierto que el problema de la decoloración de los corales no solo se debe al calentamiento del agua y al arribo masivo del sargazo en años recientes, sino también a que al aumento de los niveles de nitrógeno reactivo de múltiples fuentes. El culpable de esta presencia de nitrógeno, cada vez más alta, son las aguas residuales, los fertilizantes y el suelo superior tratados de manera inadecuada.

Factores específicos que están causando la muerte de los corales

  • Sedimentación que proveniente del desarrollo costero, las escorrentías de aguas pluviales urbanas, la silvicultura y la agricultura. La sedimentación se ha identificado como uno de los principales factores de estrés para la existencia y la recuperación de las especies de corales y su hábitat. El sedimento depositado en los arrecifes puede asfixiar a los corales e interferir en su capacidad de alimentarse, desarrollarse y reproducirse.
  • Nutrientes (nitrógeno y fósforo) del uso de fertilizantes agrícolas y residenciales, descargas de drenaje (que incluyen plantas de tratamiento de aguas residuales y sistemas sépticos) y residuos de origen animal. En general, los nutrientes son beneficiosos para los ecosistemas marinos. Sin embargo, los arrecifes de coral están adaptados a un nivel bajo de nutrientes; el exceso puede llevar al desarrollo de algas que obstruyen la luz del sol y consumen el oxígeno que los corales necesitan para respirar. A menudo, esto causa un desequilibrio que afecta a todo el ecosistema. El exceso de nutrientes también contribuye al desarrollo de microorganismos, como bacterias y hongos, que pueden son dañinos para los corales.
  • Patógenos de aguas residuales tratadas incorrectamente, aguas pluviales y escorrentías de corrales de ganado. Si bien es poco frecuente, las bacterias y los parásitos de la contaminación fecal pueden enfermar a los corales, especialmente si hay otras condiciones ambientales que los perjudiquen.
  • Sustancias tóxicasque incluyen metales, productos químicos orgánicos y pesticidas de descargas industriales, protectores solares, escorrentías urbanas y agrícolas, actividades mineras y escorrentías de vertederos. Los pesticidas pueden afectar la reproducción, el crecimiento y otros procesos fisiológicos de los corales. Los herbicidas, en especial, pueden afectar a las algas simbióticas (plantas). Esto puede dañar la relación con los corales y causa su decoloración. Se sospecha que los metales, como mercurio y plomo, y los productos químicos orgánicos, afectan la reproducción, la tasa de crecimiento, la alimentación y las respuestas defensivas de los corales.
  • Basura y microplásticos, la eliminación inadecuada de desechos y las escorrentías de aguas pluviales. La basura que llega al mar, como bolsas de plástico, botellas y aparejos de pesca desechados (también llamados “desechos marinos”), puede engancharse en los corales y bloquear la luz del sol, necesaria para la fotosíntesis, o enredarse y matar a los organismos de los arrecifes y romper o dañar a los corales. Los corales, los peces, las tortugas de mar y otros animales de los arrecifes pueden tragar estos plásticos y microplásticos degradados (p. ej., microesferas de los jabones), lo que puede obstruir sus vías digestivas e introducirles tóxicos.
Puerto
Actividades en el puerto

La mayoría de los arrecifes de coral se encuentran en aguas superficiales, cerca de la costa. Como resultado, son particularmente vulnerables a los efectos de las actividades humanas, tanto a través de la explotación directa de los recursos de los arrecifes como de los impactos indirectos de las actividades humanas realizadas en la tierra y la zonas costeras.