Es un hecho que el planeta está en riesgo, se habla de los ríos, los mares contaminados y se ha tomado medidas drásticas, sin embargo ¿qué pasa con el suelo?
El suelo se compone por minerales, pequeños organismos, materia orgánica, agua y aire. Es una capa, que tarda incluso siglos en formarse, y un elemento vital que proporciona los nutrientes y agua para nuestros alimentos y plantas. Los suelos pueden contaminarse por causas naturales como lo son las erupciones volcánicas o lluvias acidas, sin en cambio, la contaminación antrópica es la que los seres humanos provocamos.
Se aproxima que 43% del desgasto de los suelos en el mundo es en áreas forestales, la mayoría de las causas tiene que ver con la actividad humana y en México el 63% del territorio se encuentra afectado, datos recopilados de CONAFOR (Comisión Nacional Forestal).
Causas de la contaminación de suelo antrópica.
- Uso de pesticidas.
- Tecnología agrícola.
- Entierro de desechos residuales e industriales.
- Verter desechos y agua residuales.
- Alcantarillado en mal estado.
Un suelo contaminado trae como consecuencia tierra infértil, afectado la actividad agrícola, la vegetación y fauna del lugar, inclusive impacta en la economía. Por otro lado, nuestra salud corre el riesgo cuando el agua potable entra en contacto con un suelo contaminado.
¿Existen soluciones contra la conminación del suelo?
La mejor solución es la prevención para no tener un suelo contaminado. Si se elimina la parte contaminada significa depositar el material infectado en otra zona donde es controlado, no la eliminación total.
Prevención
- Depósitos de desechos residuales y/o industriales controlados.
- Platas tratadoras de aguas residuales.
- Prevención y protección por las industrias.