Hablar de educación ambiental para un uso sostenible del agua es hablar de una educación transformadora que nos empuje a cambiar la forma en la que utilizamos los recursos hídricos hacia la llamada Nueva Cultura del Agua en la que seamos conscientes de que «sin lograr el acceso al agua y al saneamiento en el ODS6, difícilmente podremos alcanzar el resto de objetivos», como advirtió Carlos Garriga, director de la Fundación We Are Water, y donde debemos devolver a la naturaleza lo que nos ha dado a través de un modelo de economía circular. Una apuesta necesaria no solo en la transformación del propio sector del agua que mira hacia la digitalización y los recursos no convencionales, sino también la de la sociedad.
«Es importante reconectar a las personas con la realidad física, química y socioeconómica, que es contar con ecosistemas acuáticos para nuestro desarrollo».
La implicación de la sociedad civil es clave para poner sobre la mesa la urgente necesidad de gestionar y utilizar el agua que tenemos de forma eficiente y sostenible, y la educación ambiental es una de las principales vías para conseguirlo.