Lodos residuales ¿más que un desperdicio?

Recientemente se han realizado estudios que reportan que los lodos residuales incrementan del 10 al 85% el rendimiento de los cultivos en relación con fertilizantes comunes, por lo que su aprovechamiento puede generar grandes beneficios en el sector agrícola.

Los lodos residuales o biosólidos, son materiales orgánicos producidos durante el tratamiento de aguas residuales por medio de biodegradación, estos pueden ser utilizados en diversos usos beneficiosos, como su incorporación a los suelos o terreno para abastecerlo de nutrientes y para renovar la materia orgánica. Los lodos residuales se pueden utilizar en terrenos agrícolas, bosques, campos de pastoreo o en terrenos alterados que necesiten recuperación.

La disposición de lodos residuales a través de la aplicación al terreno tiene diversos propósitos y beneficios ambientales:

  • La materia orgánica mejora las características del terreno (como la textura y absorción del agua) para el crecimiento óptimo de las plantas.
  • Brindan condiciones más favorables para el crecimiento de las raíces e incrementan la tolerancia de la vegetación a las sequías.
  • Provee nutrientes esenciales para el crecimiento vegetal, incluyendo el nitrógeno y el fósforo, así como algunos micronutrientes esenciales, tales como el níquel, el zinc y el cobre.
  • Sirven también como una alternativa o sustitutos o complementos de los fertilizantes químicos.
  • Los nutrientes contenidos en los biosólidos no son tan solubles como aquellos en los fertilizantes químicos, y por lo tanto se liberan más lentamente.
  • Los lodos residuales son productos reciclados, por lo que su aplicación no reduce la cantidad de ningún recurso no renovable, tal como el fósforo.

A pesar de los múltiples beneficios que podría tener para los cultivos, en México, el manejo de lodos residuales es un aspecto descuidado y son pocas las plantas de tratamiento de aguas residuales que cuentan con un sistema de tratamiento de lodos.

Con todos los lodos residuales que se generan de las actividades diarias, es necesario promover entre los sectores agrícolas e industriales, procesos de producción más limpios que minimicen la generación de lodos de desecho, la recuperación de materia reutilizable de éstos, y evitar las descargas de aguas residuales sin tratamiento a la red de drenaje.

Además, es de suma importancia involucrar a la población en el uso eficiente del agua y los productos de limpieza (detergentes, desinfectantes, solventes, etc.) que, en ocasiones, se usan de forma excesiva, generando problemas en las plantas de tratamiento de aguas residuales, por la formación de espumas y la desestabilización de los sistemas biológicos de tratamiento.

El objetivo que se persigue con una correcta gestión de lodos residuales, es solucionar los problemas de contaminación y convertir un desecho en un recurso aprovechable y no peligroso, para ser reutilizado sin riesgo sanitario. Para conseguirlo, es indispensable que las industrias agrícolas y alimenticias, cuenten en sus instalaciones con una planta de tratamiento capaz de remover los contaminantes presentes en las aguas residuales, que pueden incluso reusarse para el riego agrícola, y que permitan la disposición final de los lodos residuales para incorporarlos a sus terrenos de cultivos.