Tratamiento de las aguas residuales, la mejor opción para combatir la escasez del agua.
Las plantas de tratamiento significan una oportunidad para cuidar el agua que aún nos queda en el planeta. Cuidar este recurso es responsabilidad de todos.
Una cuarta parte de la población mundial, es decir, más de 500 millones de personas, principalmente los que viven en países en desarrollo, sufren escasez severa de agua.
Lamentablemente, en la actualidad, este recurso es cada vez más escaso debido a diversos factores, naturales, sociales y económicos; como el calentamiento global, la urbanización, el mal uso del suelo como la erosión y deforestación y, principalmente a la percepción errónea de que el agua es un recurso infinito.
Todos estos factores están reduciendo considerablemente la disponibilidad de agua apta para el consumo humano. Lo que ocasiona que en el mundo haya más de 10 millones de muertes al año, producto de enfermedades hídricas.
Por tanto, en el aspecto político, el tema de la escasez del agua se ha vuelto prioritario y una preocupación a nivel mundial, el reto de cada país es suministrar agua de calidad a los ciudadanos y optimizar la productividad de este recurso protegiendo ríos, lagos, mares y mantos acuíferos de agentes contaminantes.
Países como México, Estados Unidos y España están optando por dar una segunda vida a este recurso, la clave reside en elegir la forma segura de hacerlo, eliminando del agua agentes infecciosos o residuos tóxicos que pueden ser perjudiciales para la salud humana.
Una opción segura para la reutilización del agua son las plantas de tratamiento de aguas residuales (PTAR).
El objetivo de las PTAR es eliminar o reducir la contaminación de las aguas, ya sean naturales, de abastecimiento, de proceso o urbanas, con el propósito de darles un nuevo uso o para su descarga en ríos, lagos y mares. El proceso utilizado para el tratamiento del agua variará en función de su origen y del fin de la misma.
Existen muchas empresas dedicadas a la construcción y puesta en marcha de plantas de tratamiento de agua residual (PTAR), así como diferentes tecnologías utilizadas para tratar el agua. Entre las tecnologías más conocidas y efectivas se encuentran la de “Lodos activados” y la “Nanofiltración”
La tecnología de “Lodos Activados” se basa en un proceso biológico que permite el desarrollo de una depuración de origen natural, en la que los microorganismos son capaces de devolver el agua contaminada a su estado natural y esto se consigue a través de lo que se conoce como proceso aerobio, mediante la aireación prolongada y la recirculación de fangos activos que eliminan las sustancias biodegradables que están disueltas en el agua residual; es decir, un cultivo de microorganismos es mezclado con la materia orgánica del agua y éstos se alimentan de ella y, mediante la aireación, estos microorganismos reciben el oxígeno que necesitan para llevar a cabo su función. Para ello, es clave contar con equipos de aireación prolongada, ya que se trata de una de las mejores soluciones para tratar agua residual en pequeñas o medianas poblaciones.
Aclara es una empresa mexicana que ha logrado la implementación de la “Nanofiltración” para el tratamiento de aguas residuales. La “Nanofiltración” es un proceso de filtración por membranas, operadas bajo presión, que permiten simultáneamente la concentración y desalado de solutos orgánicos; esta tecnología es innovadora, gracias a su capacidad para separar extractos, incluso microscópicos. Su propósito es suavizar el agua y desinfectar mediante la eliminación de la materia orgánica.
Aclara fusionó esta nanotecnología con la de lodos activados, obteniendo cómo resultado un proceso de tratamiento inigualable con una calidad de agua tratada, incluso mejor que la del agua proporcionada por el servicio público municipal; la cual cumple con los estándares para poder reutilizarse en albercas, o sanitarios o si se desea, para potabilizarse. Al ser combinadas ambas tecnologías en un solo reactor, las plantas Aclara ofrecen la ventaja de ser sistemas compactos, confiables y optimizados para su operación.
La inversión en este y otros tipos de sistemas sustentables pueden combatir la escasez del recurso hídrico; problemática en la cual Aclara ha empezado a ser parte de la solución, incluso en países extranjeros, con respecto a los desastres naturales que los han dejado declarados en estado de emergencia y sin abastecimiento de agua.
La búsqueda de alternativas para combatir la escasez del agua es un impulso a la cooperación y se requiere del compromiso de la gente, principalmente de la que habita en zonas urbanas, dónde el desperdicio de este líquido vital es mayor y el agua se encuentra más contaminada a causa de los procesos industriales llevados a cabo por las empresas de la ciudad. Obtener nuevas fuentes de agua se va haciendo cada día más difícil, por tanto, es nuestra obligación cuidar de ella.